Real Sociedad 0 - Numancia 1
Real Sociedad: Riesgo; Gerardo, Ansotegi, Víctor López, Castillo; Aranburu (Mérida, min.90), Martí, Nacho (Uranga, min. 90), Xabi Prieto; Díaz de Cerio y Víctor (Delibasic, min. 83).
Numancia: Jacobo; Berenger, Boris, Palacios, Juanra; Del Pino, Nagore, Carmelo, Felipe Guréndez, Carmelo (Moreno, min. 80); Julio Alvarez.
Gol:
0-1, min. 89: Del Pino.
La Real erró ayer un partido clave aunque a la postre los demás resultados de la jornada no le hayan perjudicado. El líder visitaba ayer Anoeta y el conjunto txuriurdin podía poner a los numantinos en el punto de mira o perderlos de vista para siempre. Y eso fue lo que ocurrió. En un partido soso, el equipo donostiarra no fue capaz de desplegar su mejor juego y pagó demasiado cara su apatía con un gol visitante en los últimos minutos, decisivos en los dos partidos que la Real Sociedad ha disputado con el Numancia esta temporada.
El que pasó ayer por el feudo realista es el equipo líder de la categoría que con la victoria cosechada esta jornada da un paso de gigante para su vuelta a la Primera División. Sin embargo, el partido que ambos equipos ofrecieron ayer distó mucho de la calidad que se le presupone a dos equipos que aspiran a lograr el ascenso. Al igual que ocurriera en el partido de Soria, el Numancia no fue superior a la Real pero, como ocurriera en aquella ocasión, los minutos finales fueron decisivos para que el equipo numantino lograra el mayor botín.
La Real se mostró durante gran parte del partido superior al equipo rival, sin embargo, los jugadores no supieron aprovecharlo y no fueron capaces de crear tantas ocasiones como acostumbran. En la banda izquierda Nacho estuvo muy activo durante toda la primera parte, siendo protagonista de casi todas las internadas del equipo en esos primeros 45 minutos. En la derecho Prieto lo intentaba con menos empuje que Nacho, aunque muchas de sus internadas acabaron en falta. Pero arriba, Víctor y De Cerio no estaban tan afinados como otros días y los centros de Nacho se morían casi siempre en la zaga del conjunto rival.
Con todo, el Numancia no parecía tener excesivas prisas y se veía más cerca el gol local que el visitante. En varias ocasiones las combinaciones en ataque del conjunto txuri urdin inquietaron a la defensa numantina, pero sin llegar a crear excesivo peligro al meta visitante. Los minutos finales de esa primera parte la Real se despejó un poco y asedió con más contundencia al Numancia.
Tras el descanso la falta de inspiración volvió al terreno de juego. Los txuri urdin daban una imagen de conformismo, de apatía, de aburrimiento que contagió al partido y a las gradas. Con el paso de los minutos el Numancia comenzó a estirarse en el campo y la defensa de la Real notó la ausencia de Mikel González. La afición, conocedora de los resultados de otros campos, comenzó a temer un gol rival y el empate ya no eran tan mala opción. Sin embargo, el Numancia puso en evidencia la falta de contundencia de la zaga realista en más de una ocasión y una mala salida de Riesgo sirvió para una ocasión que no fallaría el conjunto soriano para dar un paso de gigante para su ascenso. Faltaban pocos minutos, y Anoeta enmudeció. Una vez más, los últimos minutos sirvieron para sentenciar a un equipo que en ningún momento dio verdaderas sensaciones de doblegar a la Real. Ahora, a pensar en Gijón.
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