Apatía

Albacete 0 - Real Sociedad 0

Poco fútbol se pudo ver ayer en el estadio Carlos Belmonte, entre una Real Sociedad apática y un Albacete que, a falta de 30 minutos para acabar el partido, ya daba por bueno el empate. Los pocos aficionados que se acercaron al campo, y los valientes que se aventuraron al otro lado de la pantalla, tuvieron una dosis de aburrimiento y a buen seguro acabaron contagiándose de la desidia del terreno de juego. Una ocasión más en la que la Real se dejó la calidad en el vestuario, haciendo gala de esa irregularidad de la que hablaba Lasarte los días previos.

Irregularidad...o no. En los últimos partidos el conjunto txuriurdin parece haber pagado caro la ausencia de Zurutuza así como el salto a la fama de Griezzman, quien ya no pilla de sorpresa a los entrenadores rivales. La Real parece metida en una espiral de mediocridad, aunque, sorprendentemente, sigue encaramada a la parte alta de la tabla, y pese a dejarse dos puntos en Albacete, continúa en puestos de ascenso por séptima jornada consecutiva.

La Real entró tarde al partido de ayer. Tan tarde, que quedaban unos diez minutos. En la primera parte contó con el balón, pero no consiguió sobrepasar a la defensa del Albacete, seria y sobrecargada de gente ayer. El conjunto local, por su parte, salía con rapidez y parecía poder crear peligro, aunque todo se quedaba en intenciones. Al descanso, ninguno de los dos equipos había hecho méritos para ir delante en el marcador.

En la reanudación el único cambio fue la entrada de Labaka por un lesionado De La Bella. Pero poco o nada cambió. La Real apenas presionaba la salida del balón del Albacete, recuperaba en el centro del campo ante los errores locales, pero no era capaz de crear ocasiones de peligro. Prieto y Griezzman, muy vigilados por la zaga rival, apenas entraron en juego y Sergio no era capaz de enganchar el centro del campo con un Agirretxe muy aislado.

Con el paso de los minutos fue más difícil imponerse a una cada vez más saturada defensa del Albacete, que, a falta de 30 minutos por finalizar el encuentro, decidió apostar por el 0 a 0. Fue entonces cuando la Real, con más facilidad en el centro del campo y con Bueno en el campo, pareció despertar. La genialidad que siete días atrás regalara los tres puntos al conjunto donostiarra con un gol de Griezzman ayer sin embargo no llegó. A punto estuvo, ya que a falta de un minuto Bueno tuvo una magnífica ocasión, pero el delantero prefirió tratar de controlar la pelota en vez de lanzarse en plancha a rematar, y el balón acabó en botas locales.

Un partido apático, un punto que, una vez acabada la jornada, permite seguir la estela al líder, a un Cartagena que ha estrenado derrota este mismo domingo y que visitará el fin de semana que viene Anoeta para estrenar horario en Donosti. Segundo partido matinal que habrá de jugar la Real, esperemos que con un resultado muy diferente al sufrido en Hércules, y esperemos que sea, también, la segunda derrota del líder. Una victoria obligada que haría bueno el empate cosechado ayer. Pero lo más importante es poder ver esa supuesta irregularidad de la que hablaba el míster, ver que éste equipo puede recuperar la buena imagen mostrada hace ya unas cuantas jornadas, y recuperar la sensación de ilusión que llenó Anoeta. Lo veremos el domingo a las 12.

Albacete: Notario, César, Alberto, López Ramos, Tarantino, Altobelli, Verza, Sousa, Antonio López (Isma, m 89), Stuani y Belencoso (Batres, m.74)
Real Sociedad: Riesgo, Estrada, Ansotegi, Mikel González, De La Bella (Labaka, m. 46), Xabi Prieto, Aranburu, Sergio (Bueno, m. 70), Elustondo, Griezmann y Agirretxe (Jonathan, m. 80)