lunes, 28 de mayo de 2007

This is the end, my only friend

De la peor de las maneras ha acabado al final todo esto. Sí, cierto, no se ha acabado aún pero vamos, milagros a estas alturas del año los justos. Han rozado el milagro, pero al final los pecados de juventud han pesado demasiado. Y si antes del partido ya escribi en el foro de Betierreala que tenía pinta de acabar como la película Apocalypse Now, los peores augurios se han hecho realidad y hemos bajado de una manera tan decadente y patética como la relatada en la peli. No por la trayectoria de los últimos partidos, sino por un partido lamentable en todos los sentidos: juego, ambiente, la situación en si, lo conatos de bronca, algunos aficionados de Osasuna que no sabían ni qué hacer, alguno de la Real que encima quería tocarles los cojones, la llegada de los jugadores a Anoeta,.... Patético en todos los sentidos, se mire por donde se mire.

Pero lo que más triste me ha resultado del último tramo liguero ha sido el comportamiento de cierta parte de la afición. En estas situaciones se ha visto lo mejor y lo peor de esta santa casa. Tenemos una afición que se vuelca con el equipo hasta/ sobre todo en los peores momentos, y eso es para estar orgulloso. Pero también tenemos comportamientos chavacanos a más no poder con los que servidor por lo menos no puede más que sentir verguenza. Hemos pasado en algunos partidos de estar en la miseria a tocar la salvación con los dedos. Y el efecto que en algunos ha provocado eso no podía ser peor. Con la chulería del que no tiene nada que perder (porque lo tiene todo perdido) y si mucho que ganar hay quién se ha dedicado a reirse de los demás, a desear el mal ajeno más allá del lógico y legítimo bien propio, a autoconvencerse de que algo es posible basandose en la eterna lógica de joder al otro: pedir pisotones al rival, llamar hijo de puta a cual, pedir la muerte del otro, desear largos inviernos en el infierno de la segunda a otros...etc etc etc. Un largo de etc de estupideces y soplapolladas.

Está claro que si queremos (queríamos) salvarnos la clase estaba en dejar a 3 atrás, y que además para ello el equipo tenía que estar confiado en la victoria. De ahí a estar regodeandonos en la desgracia ajena, en desear al resto la segunda "y que no suban en la puta vida" "y que se jodan" .... con todo lo que hemos sufrido nosotros, resulta de lo más mezquino que se puede hacer. El argumento de ellos hacen lo mismo, no demuestra más que ponerte a la altura moral de áquel a quien criticas. Y ahora estamos como estamos, y precisamente por eso deberíamos aprender a no alegrarnos de cuando a otros les vaya mal, pese a ser equipos que detestemos, como puedo hacerlo yo con el Atletico de Madrid. ¿Prefiero que baje? Evidente. ¿Ponerme como un enérgumeno deseandoles bajar y cantandoles nada para joder? Lo he vivido encima y no tengo buen recuerdo.

Y ahora la respuesta es la inquina eterna a Osasuna, a sus jugadores, a sus aficionados. A llamarlos hijos de puta, mercenarios, ... en su casa. Haciendo amigos. Claro, luego presumimos de que nos llevamos bien con todos los vascos. Lo cierto es que con Alaves y Osasuna ya no nos llevamos también. Posiblemente culpa de ellos, cierto. Hemos pecado de pardillos. Pero nuestras reacciones son absolutamente irracionales y descompensadas. No tiene Osasuna culpa de nuestro descenso. Lo tenemos nosotros.

Lotina ha conseguido algo en lo que yo no creía, ha mantenido la confianza del equipo. Algo absolutamente necesario para que la Real haya mantenido esperanzas, y le quede alguna remota aún. Pero si pierdes la humildad, la confianza se convierte en fanatismo, asemás del más estúpido, puesto que estamos hablando de una cosa que no es más que deporte (miento, no debería ser más que deporte) que a veces nos hace perder la poca razón que de por si tiene el género humano.

Personalmente estoy muy pero que muy jodido. No me quiero ni imaginar el que además de por lo suyo esté jodido no ya simplemente porque a la Real se le escape la primera, sino también porque el Athletic se mantenga y tenga que esperar otro año viendo cumplida su fijación con el vecino. Y la verdad, no estoy orgulloso de este sentimiento ni mucho menos, pero no puedo quitarme de la cabeza que algun bocachancla igual hasta se lo merece. Al menos la segunda frustración.

2 comentarios:

Unknown dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Unknown dijo...

Hay gente que se olvida aquello que en su día repetimos hasta la saciedad al oviedo: no se baja por unpartido, sino por toda la liga....

Estamos donde nos merecemos ni más ni menos

Y no podría estar más de acuerdo contigo en que: tenemos por un lado una gran afición y por otro una pésima afición, creo que podemos establecer los límites de ambos extremos en esta liga.

Dudo que una afición responda tanto a su equipo después de tantos años de palos y ridículos como la neustra, pero dudo que algún equipo en muchos aspectos tenga una afición tan mala como la nuestra.