Sin chispa

Celta de Vigo 1 - Real Sociedad 1

Celta: Esteban; George Lucas, Rubén, Lequi (Guayre, m.67), Agus; Jorge, Rosada (Vitolo, m.58), Michu, Roberto Lago; Diego Costa y Perera (Mario Suarez, min.75).
Real Sociedad: Riesgo; Carlos Martínez, Labala, Mikel González, Xabi Castillo; Martí, Garitano, Aranburu; Xabi Prieto (Gari Uranga, m.72), Fran Mérida (Nacho, m.58); Díaz de Cerio (Víctor, m.80).

Goles:
1-0: Lequi, m.27
1-1: Díaz de Cerio, m.42

Así estuvo el sábado la Real sobre todo en una segunda parte donde fue incapaz de dominar a un Celta que deambuló sin mucho entusiasmo por un Balaidos que mostraba unas gradas inferiores vacías. Un partido triste, soso, en el que parecía que los dos equipos estaban ya en esa fase de final de liga donde no aspiran a nada. Cansancio físico o mental, nervios, miedo a perder.... posibles razones para una segunda parte horrible de la Real que aunque pudo llevarse los 3 puntos al final estuvo más cerca de perder un punto que a la postre ha resultado positivo en la pelea por el tercer puesto pero que nos deja ya muy lejos del Málaga y sobre todo supone una oportunidad de oro desperdiciada para haber superado al Sporting en la tabla.

La primera parte no estuvo tan mal por parte de la Real, sin demasiados problemas hasta el gol encajado la Real no movió con velocidad el balón pero controló bien el partido y confiaba en la movilidad de De Cerio arriba para marcar en algún pase largo o asistencia de Mérida. Por las bandas un Prieto mermado pero que puso algunos buenos centres y un Castillo muy activo en la banda izquierda eran los referentes. Pero en defensa se notaron algunos errores y tras un balón perdido en la medular que acabó en córner el Celta se adelantó en una cadena de errores en defensa que permitieron a Lequi rematar solo. La Real acusó el gol rival pero fue rehaciéndose hasta que en una genial jugada de X.Castillo llegó un buen centre que De Cerio llevó a las redes.

Apunto estuvo poco después de adelantar a la Real en un buen pase de Mérida pero al donostiarra le faltó velocidad. La Real se iba al descanso sin dar una gran imagen pero con la sensación de que ante un Celta pasota podía llevarse los 3 puntos, tuvo llegadas, ocasiones y bastantes jugadas a balón parado que peor no se podían ejecutar. A poco que se pusieran un poco las pilas la Real podía ganar con facilidad.

Espejismos, el centre-chut de Castillo dio paso a una segunda parte horrible de la Real, sin juego, sin mover el balón con velocidad con un trivote que lo más que hacía era ahogar el centro del campo propio y rival. Al Celta le importó poco porque se limitó a crear ocasiones en balones largos y la Real no supo encontrar una alternativa. La entrada de Nacho por Mérida podría haber valido para al menos revitalizar la banda izquierda pero no sirvió para nada y Prieto se fue mermando a base de alguna patada que se llevó y acabó sustituido por un Uranga que aportó ídem que Nacho. Bandas inexistentes, centro del campo que no combinaba ninguna jugada de peligro y un De Cerio que no recibía balones, la entrada al campo de Víctor por De Cerio no aportaba nada nuevo. Solo en los últimos minutos la Real tuvo claras opciones de llevarse los 3 puntos en un cabezazo de Martí y una contra en la que el propio Martí paso tarde y Uranga se obcecó en chutar sin ángulo con el consiguiente resultado.

La falta de ambición del Celta demuestra que están ya de vuelta de todo, pero en la Real, más aún sin saber el resultado del Sporting la apatía y el conformismo con el punto son de preocupar, si quiere seguir en la pelea por el ascenso al menos.